Para quienes vivimos en Argentina, el triunfo de Cristina F. de Kirchner era algo más que anunciado. Lo que se debatía en realidad eran el segundo lugar y el porcentaje con el que ganaría. Con tanta información disponible, no pretendo hacer una nota más, sino llamar la atención sobre algunos aspectos que podrás profundizar en Internet.
Algo de lo que más llama la atención es que este casi 54% de votos tiene una fuerte desproporción en el país: en Capital Federal, por ejemplo, se convierte en 35% vs 27% para Binner, mientras en Santa Fe es 41% vs 39% para el mismo Binner; en cambio en Santiago del Estero es 81,91% para Cristina y 7,06% para Alfonsín, con lo que se evidencia que los porcentajes no dicen mucho en número gruesos. En la imagen, una parte del gráfico en que se muestran los votos por provincia, y acá la nota completa
Respecto a eso, sería muy interesante poner estos datos en contraste con el nivel de ingreso per-capita. Me parece que los apoyos sociales se reflejarían claramente. ¿Hasta dónde esto está bien o mal? Difícil decirlo en un post, pues es un análisis complejo, pero en pocas palabras, me atrevo a decir que depende de qué tanto se logre cambiar a las instituciones y fortalecer al Estado, no al gobierno. Hay mil cosas que funcionan muy bien en Argentina, pero otras mil que son increíbles para un país que se jacta de su liberalismo, apertura, democracia y ética.
No puedo dejar esta nota sin pensar en lo peligroso de los caudillismos en Argentina. Ayer terminé de ver "Evita" y leer el "Facundo" de Sarmiento. La historia es interesante porque siempre nos permite mirarnos en retrospectiva y este tema de los líderes-caudillos es viejo en nuestra América Latina, tan necesitada de héroes y tan renuente a los estadistas. La Argentina no se escapa y un modelo interesante es la creación actual del nuevo caudillo: uno que anda de pelo largo, toca en una banda de rock, maneja Harley-Davidson y tiene una novia linda y conductora de televisión. ¿Algo más puede pedir? Bueno, adivinaron bien: Amado Boudou logra ser vicepresidente junto a Cristina. ¿No parece el inicio de una linda película que veremos desfilar estos años y convertirse en nuevo episodio en 2015?
Muy interesante, Samuel. Otro dato de Amado Boudou es que antes de su mágica conversión al peronismo militaba en el partido del neoliberalismo, los golpes de estado, y el ajuste.
ResponderBorrarAdemás de correlacionarlo con el ingreso per cápita, me parece que también estaría bueno hacerlo con:
-nivel de educación
-índices de pobreza e indigencia
-porcentaje de la población activa que trabaja para el estado provincial (en Formosa, por ejemplo, es el 80%... cerca del porcentaje de votos que sacó CFK)
-Índice de desarrollo humano del distrito en cuestión
Creo que se pueden sacar algunas conclusiones interesantes...
Gracias por el comentario mi querido Gman! Esperemos que algún estudiante de doctorado sin tema de estudio se decida por éste!
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