Hace más de 8 meses que intento resolver esta duda. Dado que comencé los cursos de doctorado hace no mucho, ahora intento aplicar la parte de teoría que he absorbido en los últimos tiempos: si la compactación del espacio y del tiempo actúan de una forma tan extrema (Lash y Urry 1998, Giddens 19XX, Appadurai 2001), ¿será posible que logremos andar sin tener que desplazarnos?
Esto equivale a pensar que podemos hacer turismo en casa, academia en el campo, empiria teórica... y que uno que quiso ser andaryego, termine por pasar miles (está bien, exagero, cientos) de horas detrás de un escritorio estudiando cómo otros viajan. ¿Lo permitirá esta modernidad líquida, esta compactación espacio-temporal, o también llamada del cronos y del topos?
Bueno, el asunto, en términos "pedestres", como hubiera dicho uno de mis profes, es que ya terminó el primer año de doctorado. Se supone que tengo una idea más o menos clara de lo que quiero estudiar, pero la pregunta es si resistiré el embate académico cuando lo que intento es analizar el espacio práctico: la realidad. Tal vez la pregunta más fuerte es si lo que uno estudie, observe, piense y reflexione será válido en la realidad...y si al final, valdrá la pena tanto estudio para darse cuenta que otros ya lo habían descubierto, como alguna vez lo planteé acá.
Dicho de otro modo: ¿Es mejor la academia que los proverbios de los abuelitos? Por hoy, es la reflexión. Paro y los que se suscribieron no se asusten, que ahora estoy emocionado con esto, pero no les voy a saturar sus buzones de mensajes filosóficos.
No hay comentarios.:
Publicar un comentario