No marchamos, sólo permanecimos en la plaza, pegando cartones y charlando. Es cierto que se evidencia nuestra inexperiencia organizativa, la falta de propósitos y una estructura más clara. Esperemos que algo podamos hacer al respecto. La centena de personas reunidas (estudiantes, trabajadores, hijos de mexicanos, argentinos, residentes, músicos, cantantes y demás) mostró también que nos falta un poco para llegar hasta donde queremos. Gracias Rafael, gracias Julio, gracias Juana por organizar este evento (y gracias a los que no conocí) y recordarnos que parte de la solución está en nuestras manos. ¿Qué esperamos, mexicanos en Argentina?
Fuera de que haya ganado la palma de oro en Cannes 2010, me animé a ver esta película por una reseña leída. No me arrepiento en lo absoluto y más bien agradezco que se pueda encontrar cine "alternativo" o de arte tan fácilmente por acá. 
Los que trabajamos con proyectos de "desarrollo sostenible" nos enfrentamos siempre a una infinidad de contradicciones: ¿es realmente la solución para la mejora de condiciones de vida? ¿hasta dónde podemos realmente contribuir en ello con una visión "desde afuera"? ¿Comprendemos realmente las necesidades de aquellos con los que trabajamos? ¿Qué mecanismos utilizar para lograrlo? 
Justo cuando pensabas que las cosas estaban bien claras vuelve el fantasma del cuestionamiento: ¿de qué servirán tantos años detrás del escritorio? ¿Qué cambios pretendes lograr estudiando lo que haces ahora? Justo cuando abrazabas tu proyecto con orgullo te das cuenta que tres años son muchos, que no tienes ni siquiera un esqueleto formado: apenas el cuerpo deforme de un monstruo que engendras sin saber para qué servirá.
Una película muy vieja de Al Pacino para quienes no la hayan visto.
A falta de novelas nuevas para la noche, vuelvo a Scorza:"-Oiga, amigo, yo soy enviado de la Oficina Agropecuaria para luchar contra las enfermedades de la papa. Yo puedo hacer mucho por la agricultura, pero aquí la gente es muy desconfiada. No encuentro cómo hablarles. ¿Qué le parece si yo lo gratifico con un sol por cada persona que usted consiga para una conferencia?Si no has tenido la oportunidad de leer Garabombo el invisible, te recomiendo que salgas volando a una librería y lo trates de conseguir. Manuel Scorza fue uno de los mejores escritores que conozco del Perú...
¡A caballo regalado no se le mira el diente! Esa misma noche reuní a treinta amigos. ¡Un sol por cabeza! El ingeniero se tiró su rollo. ¡Hablaba bonito! A maravilla explicó la causa de las enfermedades provocadas, según él, por animales invisibles, dizque microbios. Ya casi nos convencía cuando dice<< Y para que vean que no miento les mostraré una fotografía de esos microbios>>. Y saca la foto de un animal horroroso de mil patas y cuernos. <<Éste es el animal que malogra sus campos!>>;. La gente se mató de risa y se largó. Yo también me fui. Al día siguiente el ingeniero me increpó:
- ¿Qué pasó? ¿Por qué se fueron?
- Perdone, ingeniero, pero la gente se fue porque usted está deschavetado.
-¿Cómo así?
- Esos animales que usted mostró no existen, ingeniero. Si esos animales tan grandes vivieran aquí, ¿usted cree que nosostros ya no los hubiéramos visto?
El Abigeo concluyó:
- Así son ellos, Fermín: miran cosas que nosotros no miramos y al revés. ¡Ése es tu caso!"
"Si quieres volar como las águilas, evita rodearte de buitres y pavos."
